Tan bien cuidado como en su segundo hogar.




Queremos ofrecer a nuestros clientes una estancia confortable, disfrutando de la gastronomía regional. Por eso, el día en la Casa de los Arcos comienza con un desayuno casero.

 

Con la intención de mantener y reforzar en Vélez Blanco la variedad gastronómica y el estilo de vida auténtico, renunciamos al servicio tradicional de restauración.

No obstante, tienen a su disposición en cada momento una amplia oferta de bebidas como café, té, vino, champán y refrescos, cuyo consumo será cobrado al final de la estancia.